La Agencia Internacional de la EnergÃa (IEA son sus siglas en inglés) acaba de publicar un informe -«Capturing the Multiple Benefits of Energy Efficiency«- en el que señala que, en muchos de los paÃses que ha estudiado, los ahorros resultantes de la implementación de medidas de eficiencia energética, la cantidad de energÃa ahorrada, ha sido mucho mayor que la energÃa proporcionada por cualquier otro combustible.
La eficiencia energética es el primer combustible («first fuel») para muchos paÃses de la International Energy Agency (IEA). Esa es una de las principales conclusiones que presenta el informe «Atrapando los múltiples beneficios de la eficiencia energética», un estudio que acaba de presentar la Agencia Internacional de la EnergÃa (AIE). Según ese documento, la eficiencia energética no solo se traduce en ahorros directos de recursos energéticos, sino que, además, «tiene el potencial de impulsar el crecimiento económico, mejora el desarrollo social, ahonda en la sostenibilidad ambiental, incrementa la seguridad de suministro y beneficia a la salud».
O cambiamos, o desperdiciaremos dos tercios de esa gran oportunidad
El informe de la AIE denuncia que, a pesar de todas esas virtudes, con las polÃticas actuales, las sociedades están condenadas a desperdiciar, en los próximos veinte años, hasta dos tercios del potencial de la eficiencia energética económicamente viable, lo cual en parte es debido -explica la AIE- a que la eficiencia energética sigue sin ser lo suficientemente valorada por la sociedad. Para superar ese obstáculo, el documento ahora publicado por este organismo internacional propone a las administraciones, entre otras cosas, que empleen herramientas, que ya existen, para medir el valor de la eficiencia energética en términos económicos y sociales.
Los costes… en la salud y en la enfermedad
Según «Capturing…», la implementación de medidas de eficiencia energética en la vivienda, el construir hogares más cálidos, menos húmedos y, en definitiva, más saludables, mejora de manera brutal el bienestar de los residentes. Pues bien, la AIE asegura que ahÃ, por cada dólar invertido en eficiencia energética, es posible lograr retornos de hasta cuatro dólares. ¿Y cómo llega a esa conclusión? Midiendo los costes de los cuidados médicos. A saber: el valor del tiempo de trabajo perdido por los empleados que enferman, o los costes que se derivan de la prestación de cuidados a los hijos cuanto los que enferman son los pequeños.
La medida de los retornos
En el acto de presentación del informe, que ha tenido lugar en BerlÃn, la directora ejecutiva de la Agencia Internacional de la EnergÃa, Maria van der Hoeven, ha explicado que «Capturing…» pretende animar a los gobiernos a que inviertan más tiempo en la cuantificación de los impactos de sus polÃticas de eficiencia energética. Ello servirá -según Van der Hoeven- para que las administraciones conozcan mejor la medida en que la eficiencia favorece el desarrollo económico y social y servirá asimismo para facilitar el diseño de polÃticas que maximicen todos esos beneficios que la eficiencia energética puede traer a una sociedad. «Atrapando los múltiples beneficios de la eficiencia energética» cuantifica en 300 mil millones de dólares lo que movió el mercado de la eficiencia energética en el año 2012.